El "boom" Colegiales / Chacarita

TRANSFORMACIONES URBANAS: EL VALOR DEL METRO CUADRADO EN LA ZONA SE TRIPLICO EN DOS AÃ'OS Colegiales y Chacarita, copados por nuevas viviendas y restoranes fashion> Con Palermo Hollywood saturado, estos dos barrios están en pleno crecimiento. Productoras de cine y TV conviven con megaemprendimientos inmobiliarios. La demanda de terrenos ya supera a la oferta. Vivian Urfeig Palermo Hollywood está saturado, no entra un solo local más. Así, el "efecto catarata" genera que restoranes de autor, negocios de indumentaria y objetos se estén ubicando en Colegiales y parte de Chacarita. Estos barrios que se codean con Belgrano, y por supuesto, Palermo, están creciendo. Sus casas chorizos y amplios galpones se transforman para convertirse en productoras de publicidad, estudios de grabación o emprendimientos inmobiliarios de lujo. Los que se quedaron afuera del mapa fashion, pero quieren estar cerca de esa movida, eligen las calles tranquilas y arboladas de esta zona delimitada por las avenidas Federico Lacroze, Forest, De los Incas, Cabildo, Jorge Newbery, Crámer y Virrey del Pino (Colegiales). Y también las calles empedradas de Chacarita que desde las avenidas Corrientes y Dorrego bordean esta frontera y se benefician con su vecino en ascenso. En dos años, el precio promedio de los terrenos trepó desde US$ 432 hasta US$ 1.260 el metro cuadrado en Colegiales, según la Dirección General de Sistemas de Información Geográfica del Gobierno porteño. Los datos oficiales hablan de un 191% de aumento desde 2003, más del doble de lo que subieron los terrenos en la zona Norte en el mismo período. El mismo relevamiento posicionó a Chacarita con una suba anual de sus terrenos del orden del 34,3%. Con megaemprendimientos de viviendas modernas en construcción, en las inmobiliarias confirman que la demanda es superior a la oferta. Y que el barrio de Mafalda va por más. "Gracias a nosotros los precios están por las nubes", se jacta un puestero del Mercado de Pulgas, ahora clausurado y a la espera de su demorada remodelación. El predio es un punto de interés emblemático, que convoca desde turistas, diseñadores y arquitectos, hasta actores y empresarios. Frente a los puestos de antigüedades se alzó un emprendimiento de viviendas especialmente diseñadas para "las familias que vivían en Palermo Viejo y se agrandaron, pero quieren conservar el estilo de los típicos PH", dice el arquitecto Darío López (ver De colegio a...). Conocedores del reposicionamiento que se experimenta en la zona, en Chacarita no se quedaron atrás. Restoranes de autor, negocios de indumentaria y objetos acompañan la movida. La vajilla inglesa de Santa Gula y las copas desiguales invitan a degustar la comida casera y gourmet. Pegada a Colegiales, en Newbery 3902 comen famosos, vecinos y ejecutivos. "Palermo se saturó y se está cayendo hacia este lado", admite Denise Querol, una de las dueñas mientras prepara una ensalada griega con olivas negras. A pocas cuadras, en Lemos y Santos Dumont, una vieja imprenta de siete mil metros cuadrados ya está lista para convertirse en unidades de viviendas con pileta, cocheras y gimnasio. Fidelidad con el barrio es lo que buscan en M. Masamadre es con M, el restorán artesanal de Fraga y Olleros que hace un año y medio era el viejo almacén de Don Mauricio. "No hicimos un estudio de mercado ni nos interesa la moda. Quisimos instalarnos en el corazón de los vecinos", plantea Viviana Morelli. Los vecinos viven con entusiasmo el desembarco de propuestas más sofisticadas. "Jamás se me hubiera ocurrido que en la esquina de mi estudio iban a poner un restorán de sushi", se sorprende Paulina Ríos, fotógrafa. Es que desde diciembre, en Zapiola y Virrey Avilés funciona Unaghi, "una apuesta que demostró ser efectiva", señala Emilio Defelice detrás de las bandejas de rolls y sashimi listas para entregar vía delivery. "Es más tranqui, más arbolado y los precios son altos pero no delirantes como en Palermo. A esta parte muchos ya le dicen Chacalermo", dice Rodrigo Pazos, productor. Mientras que se ven pocos carteles de venta, sobran los llamados a las inmobiliarias para comprar en la zona. "La demanda es tal que tuvimos que agregar una división nueva de emprendimientos, contratar gerentes y pedir nuevas líneas telefónicas", apunta Pablo Larocca, titular de Larocca Propiedades, que en los próximos años comercializará cinco megaemprendimientos: lofts, edificios con pileta y PH con espacios comunes. Ninguno baja de los US$ 1.200 el metro cuadrado. Palermo, me tenés seco y enfermo, cantaba Gardel. Cada vez son más los que sonríen cuando este tango suena en Colegiales y Chacarita. http://www.clarin.com/diario/2006/03...ad/h-06215.htm>